El Papa Francisco animó a los cristianos a dedicar tiempo cada día a la práctica de la “lectio divina”
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En el corazón de la fe cristiana, la lectura de las Escrituras ocupa un lugar central. El Papa Francisco nos recuerda la importancia de acercarnos a la Palabra de Dios con regularidad, idealmente a diario, y de buscar la guía del Espíritu Santo cuando nos encontramos con pasajes que no nos conmueven inmediatamente.
A veces, incluso al releer un texto bíblico que nos resulta familiar y que no provoca ninguna reacción emocional particular, puede ocurrir algo maravilloso: en un momento de fe y oración, ese texto puede iluminarse, hablarnos directamente, ofrecer claridad sobre un problema que enfrentamos o revelar la voluntad de Dios en una situación concreta. Este fenómeno, explica el Papa Francisco, es obra del Espíritu Santo, quien hace que las palabras de la Escritura se vuelvan vivas y llenas de luz.
Durante su audiencia del 12 de junio, el Papa Francisco enfatizó esta verdad mientras reflexionaba sobre el Espíritu Santo y su papel en la revelación. Nos recordó que el Espíritu no solo inspiró las Sagradas Escrituras, sino que también las explica y mantiene su relevancia eterna. La Iglesia se alimenta de la lectura espiritual de la Biblia, guiada por el mismo Espíritu que inspiró su escritura.
El núcleo del Evangelio es la muerte y resurrección de Cristo, que desvela todos los misterios y ofrece la verdadera clave para entender toda la Biblia. Este acontecimiento central ilumina tanto las Escrituras como nuestras vidas. El Papa Francisco anima a los fieles a practicar la «lectio divina«, una lectura meditativa del Evangelio, y sugiere llevar un ejemplar de bolsillo del Evangelio para leer en cualquier momento del día.
Además, destaca que la liturgia es la mejor manera de comprometernos con el Evangelio, ya que en ella podemos ver cómo las enseñanzas del Antiguo Testamento encuentran su cumplimiento en Cristo. Las homilías, señala el Papa, deben ser breves y claras, trasladando la Palabra de Dios del libro a la vida diaria. Una homilía eficaz comunica un pensamiento, un sentimiento y una acción concreta, ayudando a los fieles a aplicar las enseñanzas del Evangelio en su vida cotidiana.
El Papa también nos invita a no dejar que las palabras de la Escritura caigan en saco roto. Cuando una palabra de Dios nos toca el corazón, puede iluminar nuestro día y fortalecer nuestra oración.
Finalmente, en su llamado a la oración, el Papa Francisco nos urge a rezar por la paz en el mundo, recordándonos que la guerra es siempre una derrota. Nos pide que recemos por países como Ucrania, Palestina, Israel y Myanmar, y por todos aquellos lugares afectados por conflictos, pidiendo al Señor la fuerza para luchar siempre por la paz.
Conclusión:
La lectura diaria de las Escrituras no es solo una práctica devocional, sino un encuentro continuo con Dios a través de su Palabra viva y activa. Con la ayuda del Espíritu Santo, esta práctica puede transformar nuestras vidas, ofreciéndonos luz y guía en nuestro camino de fe. Que nunca dejemos de buscar en las Escrituras la verdad y la sabiduría que Dios nos ofrece cada día.
FUENTE: https://www.osvnews.com/2024/06/13/el-espiritu-y-las-escrituras-arrojan-luz-sobre-los-problemas-de-la-vida-dice-el-papa/
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